El 26,4% de los pequeños comercios españoles consideran las operaciones en efectivo como su método de pago preferido según la última Encuesta nacional sobre el uso del efectivo realizada por el Banco de España.
Para los comercios es importante ofrecer a sus clientes el mayor número posible de métodos de pago. De este modo, ofrecen comodidad a los consumidores y se aseguran no perder en ningún momento una venta por no disponer de la forma de pago elegida por cada persona.
En muchos negocios priorizan el uso de efectivo porque así lo prefieren sus clientes: para más de un tercio de los españoles es el método de pago más utilizado.
Operaciones en efectivo, las preferidas del 26,4% de comercios
La encuesta del Banco de España señala que uno de cada cuatro comercios (un 26,4%) prefiere el pago en efectivo, incluso cuando ofrecen otras alternativas como el pago con tarjeta o el pago móvil.
Esto se debe, en parte, a que el 35,9% de los ciudadanos manifiestan que su forma de pago más utilizada es el efectivo. Este porcentaje, además, se incrementa en la franja de jóvenes entre los 18 y los 24 años (60,3%) y entre los mayores de 64 años (53%). En el resto de franjas de edad, entre los 25 y 64 años, la preferencia por las operaciones en efectivo oscila entre el 25,1% y el 30,8%.
Además, el uso de efectivo es mayor en municipios de menos de 100.000 habitantes, donde es el más utilizado por el 37,5% de los ciudadanos encuestados.
Cuánto se puede pagar en efectivo en una tienda
Hasta julio de 2021 el tope para pagar en efectivo era de 2.500 euros, pero, desde la entrada en vigor de la Ley 11/2021, este importe se ha reducido a 1.000 euros, o su equivalente en moneda extranjera.
Además, en el caso de querer utilizar monedas, la normativa europea establece que cualquier pago está limitado a la entrega de 50 monedas máximo, sea entre organismos públicos, comercios o particulares.
Restricciones al uso de la tarjeta de crédito
Otro de los motivos por el que más de un cuarto de los comercios encuestados prefieren las operaciones en efectivo es que, para que un establecimiento pueda aceptar pagos con tarjeta debe disponer de un datáfono o TPV. Hacer uso de este aparato supone que el retailer debe pagar una comisión a su entidad bancaria cada vez que se utilice. Esta comisión variará según el banco y la facturación mensual del negocio.
Esto lleva a que un 16% de los pequeños comercios impongan restricciones al pago con tarjeta en sus establecimientos. La media del importe mínimo de compra a partir del cual se acepta el pago con tarjeta es de aproximadamente 11 euros según el Banco de España.
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